La plataforma de streaming Twitch está atravesando uno de sus momentos más complejos, enfrentándose a una oleada de críticas y controversias. Entre los problemas más destacados se encuentran las denuncias de streamers que aseguran haber sido desmonetizados debido a su país de origen, mientras que los rumores sobre una posible adquisición por parte de Kick están ganando fuerza en la comunidad.
Denuncias de desmonetización por discriminación
Streamers de diversos países han alzado la voz contra Twitch, alegando que han dejado de recibir ingresos por razones relacionadas con su procedencia. Uno de los casos más resonantes es el de un streamer iraní con más de 300,000 seguidores, quien reveló que no recibió pagos durante el último mes y lo atribuye a tener la etiqueta «Irán» en sus transmisiones. Según sus declaraciones, esta situación surgió pese a que evita tratar temas políticos en su contenido.
Por su parte, un creador de contenido venezolano también reportó haber sido desmonetizado, perdiendo miles de dólares en ingresos publicitarios, a pesar de que los anuncios continuaban apareciendo en su canal. Este streamer señaló que, aunque no reside en su país de origen, no recibió ningún aviso previo de la plataforma sobre esta decisión.
Una plataforma en crisis
Las denuncias llegan en un momento crítico para Twitch. Según diversas fuentes, la plataforma podría haber perdido hasta el 70% de sus anunciantes debido a la creciente presencia de contenido político en las transmisiones. Aunque Twitch ha intentado implementar nuevas medidas para abordar estos problemas, como la introducción de categorías específicas para contenido político, estas acciones parecen haber tenido poco impacto positivo.
Además, Twitch ha sido objeto de fuertes críticas por decisiones recientes relacionadas con el baneo de creadores de contenido provenientes de regiones en conflicto, como Israel y Palestina, lo que ha intensificado la percepción de discriminación y sesgo en la plataforma.
¿Podría Kick adquirir Twitch?
En medio de esta tormenta, el cofundador de Kick, una de las plataformas emergentes de streaming, declaró recientemente que su objetivo es superar a Twitch o, incluso, adquirirla. Estas palabras no solo han generado debate en la comunidad, sino que también refuerzan la idea de que Twitch podría estar en una posición más vulnerable de lo que aparenta.
¿Qué sigue para Twitch?
La plataforma debe enfrentar una serie de retos urgentes para recuperar la confianza de sus usuarios y anunciantes. Las denuncias de discriminación y las medidas poco claras han dañado su reputación, mientras que competidores como Kick continúan ganando terreno.
Con estas tensiones al rojo vivo, el futuro de Twitch parece más incierto que nunca. ¿Podrá superar la crisis o será este el principio del fin de su hegemonía en el mundo del streaming?